El paisaje es inconfundiblemente característico de las Rías Baixas. Las cepas se ordenan bajo un sistema de conducción de parras y se orientan hacia el sol en la parte de la solana. La Albariño, a pesar de ser una variedad netamente atlántica, ama el sol. Esta autóctona y noble uva suele alcanzar su máximo potencial cuando se vendimia en su punto óptimo de maduración.
Los vinos elaborados en esta bodega, todos ellos, 100% Albariño, se muestran fragantes y sólidos ya que su excelente ubicación permite una maduración perfecta de las uvas. Estas cualidades les permite incluso elaborar originales Albariños de fermentación en barrica como el Nora da Neve, todo un reto para la bodega.
Nora da Neve nace como un vino seleccionado en cuya composición intervienen los mejores racimos de la Albariño que fermenta íntegramente en barricas de roble francés, rindiendo homenaje a la tradición de los antiguos blancos de esta tierra, que permanecían conservados en viejos envases de roble.
Para encontrar el equilibrio perfecto entre la madurez del fruto y la sensación de frescura, embotellan los vinos de la última cosecha en el mes de marzo siguiente. El resultado es un Albariño capaz de mantener la frescura del primer día en su tercer año de vida. Nora se presenta como un blanco fragante a la nariz (lima y naranja, fruta carnosa), untuoso y rico en sensaciones al paladar, con suficiente estructura para crecer en la botella.
