La zarzuela contemporánea Trato de favor, compuesta por Lucas Vidal y escrita por Boris Izaguirre, es, tras Policías y ladrones —estrenada esta misma temporada—, el más reciente encargo y estreno absoluto del Teatro de la Zarzuela. Esta nueva zarzuela, que cuenta con la dirección de escena de Emilio Sagi y en la que los maestros Andrés Salado y Salvador Vázquez alternan en la dirección musical, se suma a las más de 800 composiciones líricas de autores españoles estrenadas en este mismo escenario de la recién bautizada Plazuela de Teresa Berganza.
En esta ocasión, como decimos, son dos nuevos nombres los que se unen a la nutrida lista de creadores del género: el del compositor de proyección internacional Lucas Vidal y el del conocido y reconocido escritor y presentador de televisión Boris Izaguirre, que han creado una obra divertida –por momentos encantadoramente disparatada–, repleta de situaciones y personajes desternillantes, que nos muestra una Nueva Sociedad del país en la que todo el mundo querrá estar en la cárcel.
Y es que la historia de Trato de favor transcurre por completo en una cárcel de mujeres en la que ingresa por motivos financieros colaterales una gran diva de la canción y el show business a la que dan vida las sopranos Ainhoa Arteta y María Rey-Joly, quien como Javier Tomé, Cristina Faus y el maestro Salvador Vázquez, interviene en dos de las funciones programadas. La pregunta está en boca de todos: ¿Cómo sobrevive una diva en prisión?
Lucas Vidal desvela su gusto por la zarzuela desde muy temprana edad, hasta el punto de llegar a convertirse en una obsesión: «Tan lejos llevé mi pasión –dice el compositor– que cuando estudiaba a los grandes de la música clásica empecé a realizar versiones “zarzueleras”, tratando de que Bach se acercara a Sorozábal, de que Beethoven acariciara a Bretón, de que Mozart se convirtiera en Chueca…».
Sueño cumplido: zarzuela para todos
Y llegó el día en que pudo cumplir uno de sus más recurrentes sueños con el encargo de este Trato de favor por parte del Teatro de la Zarzuela. Un proyecto que «sin ningún género de duda» se sitúa «entre los más especiales y emocionantes» en que ha participado nunca: «Me ha permitido crecer como artista y ha hecho posible que aquel pequeño niño zarzuelero de siete años que giraba obsesivamente la manivela de un organillo antiguo, cumpla su sueño de demostrar al mundo que la Zarzuela, definitivamente, es para todos».
El director de escena de esta nueva producción del Teatro de la Zarzuela, Emilio Sagi, veterano en el género y gran colaborador del coliseo que dirigió durante una década, explica que Trato de favor «está en la línea de las obras de la primera mitad del siglo XX». Y nos invita a descubrir cómo conecta perfectamente con la forma de hacer de Francisco Alonso o Pablo Sorozábal. Sagi está convencido de que «todos sentiremos algo porque la música combina, como en aquellas obras, lo popular con músicas y ritmos actuales». Y por experiencia bien sabemos que «por encima de todo, lo importante es que el público lo pase bien, que el espectáculo sirva de diversión y de emoción a todo tipo de espectador».
Por su parte, Andrés Salado, que colabora por primera vez con La Zarzuela —al igual que Salvador Vázquez—, revela que está «feliz por este debut en uno de los grandes teatros de este país, rodeado de un equipo artístico y técnico de ensueño». En este sentido afirma que «esta zarzuela no solamente será una hito histórico en nuestro país, sino que también demostrará que nuestro género lírico está más vivo que nunca. Trato de favor —explica— es un homenaje a la zarzuela a lo largo de su historia hasta nuestros días y también una fantasía que hará al público volar y sonreír en cada minuto de la representación». Y concluye que con esta divertida historia de Las Albricias –nombre ficticio de la prisión– todos se dejarán llevar «porque estamos ante una gran fiesta de nuestra cultura».
Cómica, absurda, humana
Esta nueva zarzuela, con un tono decididamente cómico, absurdo y humano, cuenta con un reparto doble y con un equipo artístico que tiene todas las cualidades para encandilar con creces al público. Junto a las ya citadas Ainhoa Arteta y María Rey-Joly, que interpretan al personaje protagonista de Ana Mía, están las mezzosopranos Nancy Fabiola Herrera y Cristina Faus en el papel de la directora del centro penitenciario, los tenores Enrique Ferrer y Javier Tomé como Juan Miguel, el único hombre que cumple condena en esa peculiar cárcel, compositor y productor musical, y antiguo novio canalla de Ana Mía; la cantante-actriz Gurutze Beitia como Supervisora General de Prisiones; en los roles locos y divertidos de las internas, la soprano cómica Amelia Font, la mezzosoprano María José Suárez y la actriz-cantante Lara Chaves; y la soprano Amparo Navarro, que encarna a la “doncella” de la diva encarcelada y que asume varios de los momentos claves de la trama. La función contará también con un “cameo” del propio Boris Izaguirre, y el elenco lo completan un cuerpo de seis bailarinas, dos figurantes y una música en escena, la pianista Celsa Tamayo.
En lo que concierne al equipo artístico, además del talento, la magia y el oficio de Sagi, Salado y Vázquez, el espectáculo cuenta con la asombrosa escenografía de Daniel Bianco, el siempre atractivo y por momentos deslumbrante vestuario de Jesús Ruiz, con la poesía lumínica de Albert Faura y con la ágil y eufórica coreografía de Nuria Castejón. La función del 19 de mayo será grabada por Radio Clásica de RTVE para su emisión en fechas próximas.
Estamos ante una zarzuela Contemporánea: una farsa divertida, sin gravedad ni crítica demoledora, pero repleta de buena música con la que Vidal nos deleita y con un argumento peculiar y sorprendente con el que Izaguirre nos divierte. Todo listo para entrar en la prisión de Las Albricias de la mano de este loco vodevil, de esta nueva Zarzuela.