Se trata de un proyecto en el cual los turistas podrán no sólo disfrutar de las delicias culinarias de la región de Varaždin sino también participar en su preparación en 11 haciendas familiares.
Con ese proyecto se reforzará la oferta turística pero también se unirá a los productores de alimentos tradicionales, entre los cuales algunos están protegidos, como por ejemplo la col de Varaždin, klipić (rollo de pan), miel y rakija (aguardiente) de miel, aceite de calabaza y otros. Hasta finales de año los productores incluidos en el proyecto recibirán una mesa de informes con sus datos, su posición en el mapa pero también una historia interesante que hablará de los productos que fabrican.
Dentro del proyecto se ha establecido una señalización marrón, se ha confeccionado un catálogo en croata y en inglés de los productos tradicionales y de los productores con un mapa donde están señalados todos los productores.
Se encuentra en confección una web específica y se ha planeado la apertura del web-shop para que los interesados desde puntos lejanos puedan comprar productos tradicionales que ofrece la provincia Varaždinska.
Además de la promoción de la comida tradicional y de los productos de primera calidad, uno de los objetivos del proyecto es que se fomente la economía rural que hasta ahora no cuenta con productos protegidos que cuenten con un proceso certificado y una promoción a los productos artesanales. La ruta de la comida tradicional a su debido tiempo se enlazará con la ya existente ruta del vino de la provincia Varaždinska.