La actual República de Macedonia se sitúa en el Mediterráneo, sobre Grecia. Y aunque su nombre nos puede llevar a confusión, la actual Macedonia no es exactamente la misma región que ocupaba el reino de Macedonia, cuna del rey Filipo II y de su hijo, Alejandro Magno.
Este país ha sido reconocido como república independiente desde hace algo menos de dos décadas, ya que anteriormente formó parte de Yugoslavia y estuvo bajo dominio de Bizancio. Al tratarse de una región del mediterráneo testigo del florecimiento de diversas civilizaciones, culturalmente, Macedonia es muy rica en legado cultural. Desde el neolítico, el hombre ha habitado esta tierra y dejado su impronta en multitud de formas. Romanos, árabes, cristianos ortodoxos han convertido este crisol de culturas en un pueblo orgulloso de su pasado y de su lucha por la independencia.
Skopje, la capital y mayor ciudad de la república, se encuentra al norte, junto al río Vardar. Fundada en el siglo III a.C. por los Dardanios, estuvo bajo el mando del rey Filipo II y formó parte del vasto imperio de su hijo, Alejandro Magno. Scupi, en época romana, fue una floreciente ciudad gracias a su situación privilegiada como cruce de rutas comerciales. De esta época aún quedan como vestigios las termas, una basílica del siglo IV cuyo arco central se halla cubierto de mosaicos, un teatro construido de acuerdo con el diseño romano de la época y un palacio decorado con frescos.
También hay restos de un acueducto de piedra construido en el siglo VI y, posteriormente, reconstruido dada su importancia como modo de provisión de agua a la ciudad desde las montañas de Skops Crna Gora. En el año 518 sufrió un terrible terremoto, causa de la entrada en declive de la ciudad. Unos veinte años después los bizantinos construyeron Justiniana Prima, como sucesora de la antigua ciudad en ruinas, rodeándola de numerosas fortalezas, entre ellas la de Crnce, fundamental en la defensa de la ciudad ante los ataques de las tribus eslavas. Un siglo más tarde, la ciudad claudicó ante la irrupción de los eslavos que le dieron su actual nombre.
Bajo la fortaleza se encuentra el viejo bazar de Sokpje, donde aún sobreviven los mismos puestos de hace cien años. Kurshumli Inn es un impresionante edificio que se encuentra en el bazar. Construido en la época de Justiniano, su mayor esplendor lo vivió como palacio en la época de dominio turco. Finalmente fue convertido en cárcel, en funcionamiento hasta finales del siglo XIX.
Los baños turcos de Daut Pash se encuentran junto al puente de piedra y son una muestra de la arquitectura profana islámica. En uso durante dos siglos, los austriacos dirigidos por Piccolomini causaron graves daños al quemarlo.
El puente de piedra de Skopje conecta las dos orillas del Vardar. Su datación es imprecisa, ya que algunos autores la sitúan en el siglo VI y, otros en el siglo XV. Originalmente compuesto por 13 arcos semicirculares, fue restaurado en 1992 cambiando su aspecto inicial.
HERACLEA LYNKESTIS
Junto a Bitola se encuentra Heraclea Lynkestis, primitivo asentamiento de la tribu Lynki. Heraclea fue fundada por Filipo II en torno al siglo IV a.C., pero alcanzó su punto álgido en época romana. Convertida en sede episcopal en el periodo cristiano, podemos encontrar vestigios de iglesias bizantinas. Esta antigua ciudad también tuvo teatro en forma de herradura y donde probablemente uno de los espectáculos que se ofrecía al público era la lucha de gladiadores.
STOBI
Otra de las ciudades antiguas que podemos encontrar en Macedonia es Stobi, situada al sur de Veles, un estuario del Crna. La creación de la ciudad como tal se data entre los siglos III y II a.C., pero se han encontrado indicios de asentamientos desde el neolítico. Era aquí donde se hallaba la fábrica de la moneda de entonces: El denario.
Tras dos enormes terremotos, Stobi fue totalmente abandonada. Quedan restos del magnífico teatro, con características muy similares a los griegos, y con un aforo para 7.000 personas. En un momento de su historia se convirtió en Arena para gladiadores. También se ha descubierto en la ciudad una basílica episcopal con numerosos mosaicos.
VINICKO KALE
Sobre la colina que se encuentra junto a Vinica se encuentra Viniko Kale, conocido por sus mosaicos.
Uno de los mayores descubrimientos en suelo macedonio se realizó en 1985, al encontrar iconos de inicios del cristianismo, fechados alrededor de los siglos VI y VII. Se trata de los únicos mosaicos encontrados en Europa realizados con un molde que les aporta dos dimensiones diferentes.
Otro de las citas para los amantes de hallazgos arqueológicos se encuentra junto a la villa de Marvinci. Se han encontrado vasijas, joyería, armas, estatuas, ánforas y monedas en este asentamiento que probablemente fue fundado en el siglo VI a.C.
VARDAR HILL
Uno de los asentamientos donde, presumiblemente, habitaron los más antiguos habitantes de estas tierras se encuentra en Vardar Hill. Sus primeros pobladores vivieron aquí en el siglo XIII a.C. Se han encontrado monedas de la época de Filipo II y de Alejandro Magno. Probablemente fue abandonado en el siglo II a.C.
MONASTERIOS
Las faldas de las montañas macedonias están sembradas de monasterios escondidos. La paz y el silencio tan ansiados por los monjes son el motivo por el que estos lugares son de difícil acceso. Tradicionalmente sólo estaban abiertos a los habitantes de las poblaciones cercanas y sólo para el culto religioso.
Ohrid es conocida como la “ciudad de la luz” por los 365 monasterios e iglesias que alberga. Aquellos que además de un encuentro espiritual busquen joyas pictóricas escondidas pueden encontrar ambas en estos santuarios.
El monasterio de San Naum es parada obligada para el viajero. Junto al río Ohrid, los visitantes dicen tener una experiencia magnífica e inexplicable al arrodillarse frente a la tumba del santo que da nombre al monasterio y apoyar el oído cobre la piedra mientras se espera oír el latido de su corazón del que dicen, tiene poderes curativos. Aunque se trata de una leyenda, nadie deja el monasterio sin lanzar una moneda al pozo de los deseos que se encuentra en el patio de la iglesia.
La iglesia de Santa Sofía es una de las más grandes construidas en la edad media. Según algunas fuentes llegó a ser catedral a finales del siglo X y convertida en mezquita en la época del dominio turco. Estos cubrieron con cal las bellas pinturas, derruyeron la cúpula y construyeron un minarete.
Las pinturas de esta iglesia son consideradas como el zenit de la pintura medieval en esta zona y aquí se conservan de manera excepcional piezas pictóricas del periodo bizantino.
Dónde alojarse
Hotel Premier
Josif Josifovski Svestarot 36, Skopje
Web: http://hotel-premier.com.mk/
El maravilloso ambiente, la atmósfera y el servicio de alta calidad que ofrece su amable personal, hace del Hotel Premier una excelente opción para nuestra estancia en Skopje. El hotel dispone de 5 habitaciones dobles de lujo, 7 habitaciones triple y una de 120 m2 con baño lux. El hotel es pequeño pero con habitaciones muy cómodas. El personal habla perfectamente inglés. La ubicación del hotel es perfecta, a un corto paseo del centro.
Gastronomía
No dude en probar la sabrosa gastronomía macedonia, que combina la cocina tradicional de los Balcanes con la mediterránea, heredada de los turcos. Algunas recomendaciones: taratur (yogur ácido con trozos de pepino), pindzur (crema con ensalada de pimientos y berenjenas) y el famoso baklava (pastel con pasta de nueces trituradas y bañado en almíbar).