El nombre del nuevo aceite se refiere al símbolo de la buena suerte de la ciudad andaluza, el Indalo, que encabeza la etiqueta de la botella de cristal en la que se distribuye el producto.
El aceite se elabora a partir de aceitunas maduras que se molturan antes de las 24 horas de su recogida para evitar su oxidación y que proceden de olivos que crecen en la finca Olivar del Desierto, una de las zonas con más horas de sol al año de Europa.
La finca Castillo de Tabernas, además, posee la certificación de Producción Integrada de Andalucía, lo que significa que durante el proceso de elaboración del aceite se elaboran rigurosos controles de calidad e higiene.
Las propiedades de ‘Indaloliva’ también han sido analizadas científicamente por el Área de Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Almería para verificar sus beneficios para la salud.
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