Perteneciente al término municipal de Torrenueva (Ciudad Real), a poco más de 15 km. de Valdepeñas, el Hotel La Caminera Club de Campo se encuentra en un promontorio que se eleva sobre el vasto campo manchego. Una privilegiada atalaya desde la que se divisa un mar de olivares y tierras de labranza, como un lienzo de tonos verdes, rubios y rojizos, con un cielo infinito y esa magia de los paisajes cervantinos.
Su germen fue un antiguo cortijo, hoy completamente reformado y ampliado hasta convertirse en un moderno hotel con categoría de cinco estrellas. La Caminera se ha concebido como un destino turístico en sí mismo: un proyecto único orientado al descanso, al bienestar y a la práctica de actividades del más alto nivel –tanto de interior como de exterior– sin necesidad de salir de su finca, con más de 1.000 hectáreas de terreno. Con el objetivo de abrirse al público internacional más exigente, La Caminera está dotado de un aeródromo propio con hangar, que permite tomar tierra a todo tipo de jets privados.
La Caminera, desconexión de lujo 100% rural
Su situación es estratégica: a poco más de dos horas de Madrid, La Caminera representa un remanso de tranquilidad en el que refugiarse del estrés urbano. El edificio se estructura en cuatro torres conectadas por cuatro alas y un patio central porticado, al estilo manchego, con una fuente y detalles de forja. Tanto los espacios comunes como los dormitorios presentan un personal estilo decorativo que aúna piezas modernas –como las grandes lámparas cónicas de la recepción–, curiosas antigüedades y referencias al entorno, caso de distintas piezas ornamentales en madera de olivo.
En la planta superior, se reparten 61 espaciosas habitaciones (de los 32 m2 de la categoría clásica a los 82 m2 de las suites) con fantásticas vistas al paisaje, decoradas con calidez y encanto y pensadas al detalle para una cómoda estancia: cama king size, televisión de gran formato, bañera de hidromasaje y ducha de sensaciones, amenities de la delicada firma L’Occitane, etc.
Las de categoría superior presentan una zona de reposo con sillones, mientras que la más exclusiva, La Caminera suite, situada en una de las torres y con magníficas vistas, cuenta con vestidor, salón-comedor, dormitorio y dos baños, uno con jacuzzi doble.
La Caminera, gastronomía con estrella: Javier Aranda
Al frente de la dirección gastronómica de todos los espacios de La Caminera se encuentra el toledano Javier Aranda, uno de los chefs más relevantes y de mayor proyección en el panorama actual. Formado en la Escuela de Hostelería de Toledo y en grandes referentes de la cocina española como El Bohío, Ars Vivendi, Urrechu o Santceloni, Aranda saltó a la primera línea al ponerse al frente de los fogones de Piñera. En 2013 llegó su primer proyecto en solitario, La Cabra, que recibió una estrella Michelin al año de su apertura, cuando el chef contaba con solo 27 años. Gaytán, su segundo restaurante, abrió en 2016 y, a los cinco meses de su inauguración lograba también la apreciada estrella, confirmando una trayectoria meteórica.
En Retama, restaurante gastronómico de La Caminera, Aranda ha aceptado el reto de adaptar su particular esencia culinaria con un vanguardista homenaje a la cocina manchega y al producto de la tierra, mezclando modernidad y tradición en una propuesta donde recetas y materias primas locales conviven con técnicas y sabores de otras culturas; así, podemos encontrar el cremoso de sopa de ajo con sacramentos; la pipirrana con bacalao y jugos asados; la perdiz frita del revés con estragón y curry de mejillón o el lomo de ciervo, coliflor y raíz de loto. Esta ‘identidad propia con influencia global’ se condensa, en este comedor de estética minimalista, en dos Experiencias Gastronómicas: Tradición by Javier Aranda (55 € por persona; suplemento maridaje de vinos: 30 € por persona) y Retama by Javier Aranda (85 € por persona; suplemento maridaje de vinos: 45 € por persona).
Junto a Retama, La Caminera ofrece una segunda propuesta de restauración, El Prado Lounge Restaurant, con una carta variada y más informal, también bajo la supervisión de Aranda y con guiños al recetario local y de temporada (empanadillas de guiso de carcamusas, ensalada de perdiz escabechada, steak tartar, rablé de cordero al kamado o tarta de queso manchego). Ambos espacios se nutren de una espectacular bodega subterránea con más de 200 referencias de todo el mundo –con predominio de los vinos de las D.O. de Castilla La Mancha–, algunos vinos de garaje y rarezas.
La Caminera, un spa con aceites de sus propios olivos
Para relajarse tras una intensa jornada campera, nada mejor que Elaiwa Spa by L’Occitane –elaiwa significa oliva en griego–, en alianza con esta prestigiosa marca de cosmética mediterránea de ingredientes naturales y alta calidad. Sus 800 m2 de instalaciones incluyen sauna finlandesa, baño de vapor, cromoterapia, duchas por intensidades (lluvia, cascada o cañón), pediluvio, fuente de hielo, tumbonas de contraste térmico y cinco cabinas de tratamientos (una de ellas, doble).
Entre estos, destaca un novedoso concepto, el Olive Oil Spa Sommelier: se ofrecen diferentes aceites de oliva cosechados en la propia finca (arbequina, picual y cornicabra) y se diseña un tratamiento personalizado a través de masajes inolvidables –como Acarreo, una exfoliación con huesos de aceituna mezclados con el aceite escogido; o Almazara, que combina técnicas de maderoterapia–.
La carta de tratamientos de bienestar se completa con rituales faciales antiedad o nutritivos, que pueden aplicarse con productos veganos y orgánicos; corporales (exfoliantes, reafirmantes, etc.) y exclusivamente diseñados para hombres (por ejemplo, masajes para la piel del rostro o para liberar la tensión muscular o las contracturas de la espalda, manicuras o pedicuras masculinas).
La Caminera, para amantes del golf y la naturaleza
Los aficionados al golf encontrarán un paraíso en La Caminera: a los pies del edificio se extiende su campo de golf profesional, único en Ciudad Real; un recorrido de 18 hoyos par 72 que presenta un trazado divertido, estimulante y suavemente ondulado, adaptado al bello entorno natural. Se completa con un campo de Pitch & Putt de 18 hoyos rodeado de olivos –que bordean los tees de salida y los greens–, servicio de alquiler de material y tienda especializada.
También es frecuente la visita de clientes aficionados a la cinegética, que disfrutan de un pabellón de caza independiente, una sala exclusiva para cazadores con vestuarios, mesa y chimenea, un espacio para el mantenimiento y la guarda de las armas y salida directa al coto, donde pueden disfrutar de la caza menor (de perdices al ojeo).
Eventos y retiros de empresas
Por su variedad de propuestas de ocio, gastronomía y bienestar, y sus diferentes espacios adaptados a cada momento, La Caminera es un lugar idóneo para albergar reuniones de incentivo para equipos empresariales. Las instalaciones de La Caminera se completan con una piscina exterior de 300 m2 rodeada de solárium y área lounge (que ofrece unas impresionantes vistas), dos pistas de pádel, salas de reuniones, sala fitness abierta 24 horas, sala de lectura y ludoteca infantil, junto a varios salones y terrazas aptos para eventos, con acceso directo y parking propio.
Además, el entorno permite la organización de todo tipo de actividades de exterior, a medida del cliente: vuelos en globo, picnics, jornadas de avistamiento de aves autóctonas (entre las que destacan el búho real, el águila real y el milano), barranquismo, escalada, paseos en 4×4, a caballo o en bicicleta, piragüismo en los embalses cercanos, visita a queserías y bodegas de la zona, etc.
HOTEL LA CAMINERA CLUB DE CAMPO
Dirección: Camino de Altamar, s/n. Torrenueva (Ciudad Real)
Tel.: 926 344 733
Retama: de 13:00 a 15:30 h. y de 20:00 a 23:00 h. De domingo a miércoles, cerrado cenas. Cerrado lunes.