Café Colón Madrid abre sus puertas como referencia indiscutible de una cocina elaborada con los mejores productos y servida con mucha creatividad. El concepto y la distribución de Café Colón Madrid son obra del arquitecto Sergio Sarriá.
Su chef, el gallego Jesús Barreiro, que ha trabajado anteriormente junto a Sergi Arola en La Broche, en el grupo La Máquina, el restaurante Combarro y en diversos paradores de España, ha compuesto una carta tradicional aderezada con toques modernos, en la que se conjuga una excelente relación calidad-precio.
Destacan sus pescados, la mayoría proveniente de la lonja de Ribeira, y más en concreto el morillo de atún, traído de la Almadraba de Barbate, el rodaballo salvaje al horno y la caldeirada de pescado, así como sus carnes, entre las que sobresalen el entrecot, la hamburguesa y el villagodio.
Merecen especial mención los siete tipos de arroz que se preparan, desde el rissotto con foie y boletus hasta la paella ciega o el arroz de ibéricos.
Además de los platos tradicionales, cabe subrayar el micuit de pato con costra de pistacho, para compartir; los raviolis de centollo, de pasta fresca elaborada y rellena en la propia cocina; la minicoccote de huevos perigordini, una espuma de patata hecha a mano con huevo poché y salsa perigordini, compuesta de trufa y boletus; y, como postre, la infusión de frutos rojos, al baño maría y servida con trocitos de sus propios frutos y helado de mascarpone. De la cava se aprecia la selección de vinos, con más de 100 referencias entre las opciones a elegir. Asimismo, Café Colón Madrid ofrece una gran variedad de raciones, bocatines y sandwiches para picar en su gran barra central, y latas gourmet. También dispone de platos y pan sin gluten para personas celíacas, así como de postres sin azúcar para quienes tienen diabetes.
Más que un restaurante
Café Colón Madrid
no es solo un restaurante, pues su espacio ha sido creado para resultar versátil y adaptarse así a cada circunstancia: reuniones informales de trabajo; almuerzos con prisa en la barra; citas after work para charlar con sabrosos cócteles y algún pincho, si es que surge el apetito; encuentros más íntimos en su reservado, ubicado al fondo de la sala y con capacidad para veinte comensales o treinta personas, si se trata de un cóctel particular; y comedor al uso donde disfrutar de una buena comida o cena, con sobremesa o velada incluida para deleitarse con alguno de sus cócteles.
La carta de cócteles ha sido elaborada por el bartender Alex Kim, miembro de la Asociación de Barmans de España, y se encargará de componerlos en la barra el barman Pelayo Botas, vicepresidente de la Asociación de Barmans del Principado de Asturias. Los sabores de las combinaciones creadas son exquisitos, y los hay para todos los gustos: clásicos, de autor y sin alcohol.
En la espectacular terraza, ubicada en la misma Plaza de Colón, de 100 m2 y con un total de dieciséis mesas, se ofrecen las mismas cartas que en el salón, y también admite reservas. Sus amplias sombrillas de diseño se despliegan en verano para proteger del sol a los comensales.
Un ambiente único
La decoración, llevada a cabo por la interiorista Eva Maraver, autora de proyectos como el hotel NH Sotogrande o el Spa del Eurobuilding, ha logrado crear un lugar mágico, con alma, ecléctico: sofisticado y, a la vez, muy acogedor.
La iluminación se ha cuidado muchísimo, eligiendo lámparas colgantes de latón francesas características de los años 60, de Serge Mouille, para iluminar los espejos geométricos del friso central y crear así un juego de luces muy atractivo sobre la barra. La cava de cristal del salón se transforma de noche en una lámpara de luz y todo el espacio se adorna con lámparas de globos opal y latón, fabricadas según un diseño a medida.
Se han empleado elementos tradicionales para los solados, como las baldosas hidraúlicas, pero con diseños contemporáneos geométricos y en formato hexagonal. Es común en todo el espacio la mezcla de la artesanía con la sofisticación del latón, así como las maderas naturales al aceite, que se combinan con espejos envejecidos a mano, y los materiales nobles como el mármol.
Elementos clásicos, como los florones de escayola, conviven con el cemento pulido industrial del suelo, y este se funde con las paredes de estuco gris piedra para crear una unidad cromática.
Las butacas de terciopelo rosa empolvado junto a mesas de metal se mezclan con sillas de cuero envejecido de estilo industrial, y la nota atractiva la aportan las sillas años 50 tapizadas con tela de Frida Kahlo.
A su vez, el espacio creado por la singular decoración de Café Colón Madrid se complementa con la iluminación, que se torna más íntima a medida que avanza la noche, y con la música ambiente, que también varía en función de la hora: estilo lounge al mediodía y disco-funk, entrada la tarde.
El servicio, profesional y atento
El equipo de Café Colón Madrid lo conforman personas con experiencia, que dispensan un trato amable y respetuoso al cliente.
El restaurante es accesible para personas con discapacidad que necesiten silla de ruedas, ofrece conexión wifi y servicio de aparcacoches.
Admite reservas a través de un formulario on line o llamando al teléfono 914 318 615.